7 señales que indican que debes cambiar los frenos de tu coche
Los frenos son una de las piezas más importantes del vehículo. Su mantenimiento regular garantiza la seguridad del coche y de todos sus ocupantes.
El sistema de frenos está compuesto por varios elementos, entre ellos las pastillas y los discos. El desgaste gradual de estas piezas hace que el conductor tenga una tendencia a adaptarse a la pérdida de calidad del freno, ignorando señales importantes.
Un sistema de frenos deficiente aumenta la imprevisibilidad del comportamiento del coche. Aún cuando no fallan totalmente, los frenos desgastados o con problemas dan frecuentemente origen a accidentes de diferentes niveles de gravedad.
A continuación, te mostramos una serie de tips para reconocer el estado de tu sistema de frenado:
1. Haz una revisión regular
Aunque es necesario estar siempre atento a las señales de las que te hablaremos más adelante, los especialistas recomiendan la sustitución de los discos de freno cada 80 mil kilómetros. Para garantizar la seguridad, recomiendan también un chequeo dos veces al año o a cada 20 mil kilómetros.
En esta revisión, el especialista verificará el espesor de los discos de los frenos: la generalidad de los fabricantes recomienda el cambio cuando ese espesor tenga reducido en cerca de 20%.
2. Atención a la vibración del pedal
La vibración del pedal de freno es una de las señales más claras de que es necesario verificar los frenos. De forma general, este es un indicador de que es necesario sustituir pastillas o discos. El motivo del cambio está en una deformación, que puede ser causada por el calor o por una holgura demasiado grande.
3. Escucha los ruidos en el momento de frenar
Los ruidos en el momento de frenar son otro indicador al que debes de estar atento. Podrán, igualmente, indicar un desgaste en los discos. En la mayoría de los casos, el ruido es causado por un problema de fricción: cuando el ruido es estridente, es probable que la pastilla haya perdido todo el material de fricción y este ya en contacto con el disco.
4. Atención a los cambios de trayectoria
Este es uno de los principales motivos de accidentes relacionados con los problemas de frenos. El desgaste hace con que el vehículo tenga comportamientos imprevisibles, huyendo del control del conductor.
Si notas un cambio de trayectoria cuando frenas, dirígete a tu mecánico cuanto antes. Hasta que llegues, modera la velocidad y conduce con el máximo cuidado, aumentando la distancia de seguridad.
5. Presta atención a la pérdida gradual de frenada
La pérdida gradual de frenada es también una señal a considerar. En estas situaciones debes verificar el contexto de la frenada, ya que el origen de la pérdida podrá deberse al aumento de la carga en el vehículo. Si ocurre esto, deja el automóvil descansar y vuelve a probarlo más tarde. Si el problema se mantiene, dirígete a un especialista.
6. Verifica el correcto funcionamiento del freno de mano
Esta situación puede acontecer en casos de sobrecalentamiento. Si, después de tirar del freno de mano, el coche continuar sin funcionar, es posible que las pastillas de los frenos se hayan quedado pegadas a los discos y no abran. En estas situaciones, puede ser necesario retirar la rueda y verificar el estado de varios elementos.
7. Verifica el panel del coche
Este es probablemente uno de los indicadores más claros y simples. Si encuentras una alerta en el panel del coche, dirígete a un profesional y conoce el origen del problema.
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